Vigas de madera sostienen la construcción, abogando porque Marcio no quede aplastado por la arena mientras se encuentre en su interior. Sí, el adornado castillo posee una habitación en su interior en donde Marcio duerme por la noche o en donde puede disfrutar de lectura.

Via eltiempo.com

Como todo palacio real, éste también posee un tesoro en su interior y está compuesto por libros en un espacio de tres metros cuadrados. Lleva una vida cargada de felicidad ya que no paga cuentas, renta ni servicios domésticos como agua o electricidad. Aunque sí, según afirma él, su hogar requiere de mantenimiento constante, que consiste en humedecer la arena a fin de evitar que se seque y se caiga a pedazos.

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Algunas veces, la temperatura en la playa es tan elevada que la arena retiene todo el calor, haciendo que Marcio descanse fuera de su hogar. Pero a pesar de esta situación y de no tener aire acondicionado en su interior, él asegura que prefiere su pequeña mansión, ya que no cualquiera puede darse el lujo de vivir a la orilla del mar.

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“Muchas personas tienen que pagar mucho dinero para vivir frente al mar. Yo no tengo cuentas que pagar y en realidad vivo muy cómodo aquí”, dijo Marcio. Todo un sabio el Rey de la Playa, ya quisiéramos ser recibidos en su noble castillo.