Buscá alimentos que reduzcan la ansiedad. La rutina diaria y el trabajo pueden hacer que al final del día terminemos un poco estresados o ansiosos. Para esto existe una solución bastante simple: consumí alimentos que sean ricos en fibra, como cereales integrales, semillas y frutos secos. Por supuesto, no te olvides de tomar mucha agua y realizar actividad física con regularidad.

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Comé cosas que quemen grasas. Existen ciertos tipos de alimentos que ayudan a tu metabolismo a eliminar esa grasita indeseada. Por ejemplo el jengibre, ají, té verde, café en grano e incluso el mate, ayudan a quemar los rollitos ya que generan calor en lugar de energía. Solo tené cuidado si sos hipertenso, tenés gastritis o úlceras. En estos casos no es recomendable.

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