Don Blas Ramos (56) y su esposa Ana Jara (53), quisieron buscar una nueva forma de ganarse la vida a través de un emprendimiento familiar. Es por eso que, desde hace cinco años llevan adelante la chipería “Mi Luz”, ubicada en la zona del puente Arroyo Guasu. Antes de que salga el sol, con mucho esmero la familia ya prepara la masa para el mbeju y las deliciosas chipas que quedan listas y calentitas para el amanecer.

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Don Ramos comentó orgulloso que el secreto de su negocio es mantener siempre la calidad del producto y sobre todo el buen trato con los clientes. El chipero comentó además que la chipa asador es la que más se vende, ya que se cocina en un enorme brasero que instalan en la vereda a la vista del público.

Es así que camioneros, motociclistas y muchas personas que pasan por el local, se ven tentadas a probar las famosas chipas recién cocidas, especialmente en el desayuno. Pero don Blas y doña Ana no están solos en esto: también los acompañan sus hijos Diego, Génesis, Juan, quienes apoyan a sus padres y colaboran para hacer crecer la chipería familiar. ¿Qué opinás de esta familia trabajadora?