Pasados dos meses de la intervención, los doctores le dieron una recomendación trágica; Elizaveta tenía que interrumpir su embarazo para poder someterse a quimioterapia.

Via Vice / Manolo Ceron

Sí, tenía abortar a su futuro hijo si quería curarse sin que el pequeño Valentín sufriera alguna discapacidad debido al proceso. Con 28 semanas de embarazo, Elizaveta y los médicos decidieron practicarle una cesárea. Fue una etapa muy difícil para ellos, el pequeño Valentín pasó 51 días en cuidados intensivos neonatales. No obstante, Elizaveta aún no estaba fuera de peligro.

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Por causa de la quimio no tenía hambre y tampoco podía masticar bien, a veces el agua se le escurría por un lado de la cara. Luego de seis meses de calvario, el cabello de Elizaveta está comenzando a crecer, a veces tiene problemas para hablar, pero asegura que cuando el cáncer haya quedado atrás, se someterá a más cirugías reconstructivas.

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Tal vez su carrera como modelo ya vuelva a ser la misma, Elizaveta encontró la paz en su familia, Valentín y Roman la ayudaron todo el tiempo a salvarse, a darle vida cada día. Los 14 meses que duró este proceso fueron recreados por el fotográfo Manolo Ceron, y se observan en la galería de imágenes que compartimos en este artículo. Así Elizaveta Bulokhova celebra haber sobrevivido.