Miguel Ángel Poletti Martínez tiene 39 años y es uno de los choferes más conocidos de la ciudad de Limpio. Es muy querido y respetado por la gente de la zona, pero no sólo por su trabajo como colectivero: don Poletti también es suboficial inspector y por las noches recibe llamadas de emergencias en el Sistema 911.

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“Primero fui chofer, después me decidí a estudiar para ser policía, lo logré y ahora volví a mi trabajo al volante cuando me toca estar de civil”, explicó sobre sus dos trabajos. “Yo trabajo por las noches en el Sistema 911, recibo denuncias, luego amanece y me pongo la camiseta de chofer de la línea 36 Limpio, tranquilo, como si nada”, agregó orgulloso.

Poletti comentó además que muchos pasajeros se sorprenden al enterarse de que también es policía. “Piensan es broma o que hay una cámara oculta, muchos creen que estoy disfrazado para investigar algún crimen. Pero no, realmente trabajo para mi familia, estoy casado, soy feliz con cinco hijos”, comentó.

Pero, ¿qué llevó a este chofer-policía a tener dos trabajos?  “Quiero mostrarle a mis hijos que no se debe desperdiciar el tiempo, debemos trabajar todos por construir un país mejor”, explicó muy seguro el oficial.

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Para llevar adelante esta vida tan ajetreada, cuenta con el apoyo de su esposa, sus hijos y todos sus compañeros de trabajo. Y aunque afortunadamente no le tocó enfrentar ninguna situación peligrosa a bordo del bus, asegura que si algo ocurre va a actuar “como la ley manda”. “No niego con hinchas suelen darse algunos problemas pero nada que no se pueda manejar. Trato nomás de no mostrar que soy policía”, explicó.

“Soy luego de la ciudad de Limpio, algunos me conocen y tienen como que miedo y se portan muy educados, muchos ya me esperan para subirse conmigo, dicen que se sienten seguros en mi bus. Pero en lo posible siempre perfil bajo para que nadie me dé un trato diferente ni se den cuenta», finalizó el trabajador. ¿Qué opinás de esta curiosa historia?