Los accidentes automovilísticos son una triste realidad en nuestro país desde hace muchos años. Son muchas las familias que han perdido seres queridos o se han visto en situaciones muy difíciles por esta situación; sin embargo, hay quienes creen que pese a las dificultades es posible salir adelante con esfuerzo y perseverancia.

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Don Gerardo Escobar es un taxista de la ciudad de Capiatá que día a día lucha por llevar el sustento a su hogar. Pese a sus 69 años aún trabaja con mucha dedicación a bordo de su rodado y sus años de experiencia le han demostrado que nada es imposible cuando se trata de salir adelante y progresar en la vida.

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En el año 1982, don Escobar sufrió un terrible accidente por el cual debieron amputarle una pierna: “Recuerdo que me salió un auto y me tiró para el otro lado de la calle. Lo primero que perdí fue mi pierna. Así fue como me accidenté. Yo era vendedor de jabones y me manejaba en moto”, contó este conocido vecino del barrio San José. Pese a su complicada situación, este hombre no se dejó vences y a tan solo dos días de recibir el alta, comenzó a trabajar de nuevo. “Fue un 16 de octubre que me accidenté. El 22 de diciembre de ese año salí de alta del IPS, y en enero yo ya empecé a trabajar otra vez”, relató orgulloso don Gerardo.